Foto: eTNS System/NeuroSigma

En un post previo comentamos la aprobación por la agencia Europea del medicamento del estimulador del nervio trigémino para el tratamiento de la epilepsia. Esta modalidad de tratamiento resulta atractiva al tratarse de un método de neuromodulación no invasivo que estimula eléctricamente la piel situada en la región supraorbital de la frente, en contraste con otros métodos como el estimulador del nervio vago que requiere una intervención quirúrgica. Ambos métodos comparten cierta similitud en el mecanismo de actuación, al estimular indirecta y difusamente la corteza cerebral con un efecto desincronizador de la actividad cerebral.

Recientemente se ha publicado el primer estudio aleatorizado, doble ciego y con control activo de la estimulación externa del nervio trigémino en epilepsia farmacorresistente, conducido por el dr. Christopher M. DeGiorgio, Profesor de Neurología en la Universidad de California en Los Ángeles, EEUU. Los investigadores encontraron una mejora en reducción de crisis y estado de ánimo. Hasta el momento, este es el único estudio sobre un dispositivo médico que demuestra mejoras en crisis y estado de ánimo dentro del mismo ensayo.

El estudio incluyó 50 pacientes con epilepsia farmacorresistente, siendo 25 de ellos tratados con el paradigma activo de estimulación (120 Hz, con períodos on-off de estimulación de 30 s, al menos durante 12 horas al día). Los otros 25 pacientes fueron adscritos al grupo de control activo que utiliza unos parámetros de estimulación considerados como no eficaces para el control de las crisis.

Los pacientes fueron evaluados a las 6, 12 y 18 semanas. La tasa de respondedores (que mostraron una reducción de crisis de más del 50%) aumentó de forma progresiva hasta alcanzar el 40,5% después de 18 semanas frente al 15,6% que presentó el grupo control. Otros parámetros de eficacia no fueron estadísticamente significativos.

El tratamiento fue bien tolerado, reportándose como efectos secundarios más frecuentes ansiedad (4%), cefalea (4%) e irritación de la piel (14%).

Otro resultado del estudio fue la mejora en estado de ánimo de los pacientes, utilizando la escala de Beck (Beck Depression Inventory) para este propósito: una encuesta con preguntas que responde el mismo paciente sobre sensaciones de tristeza, pesimismo y cansancio entre otros. La puntuación del grupo que recibió el tratamiento activo mejoró más del 50%.

Aunque los resultados de este estudio son prometedores, más investigaciones son necesarias para confirmar estos efectos positivos. Este estudio muestra un nivel de evidencia clase II de que esta modalidad de tratamiento puede ser efectiva en el tratamiento de la epilepsia farmacorresistente, si bien, los efectos mostrados hasta el momento no son especialmente robustos.

Indudablemente, este estudio servirá de base para estudios más amplios que incluyan un mayor número de pacientes. También se preparan estudios para uso potencial en Trastorno por Estrés Postraumático y Trastorno por Déficit de Atención y Hiperactividad.

Para leer más: DeGiorgio CM, et al. Randomized controlled trial of trigeminal nerve stimulation for drug resistant epilepsy, Neurology 2013;80:786-791.

http://www.epilepsiamadrid.com/nueva-modalidad-de-tratamiento-aprobada-en-europa-para-el-tratamiento-de-la-epilepsia/