Pues….según los resultados de una reciente revisión sistemática publicada en el número de marzo de la revista Epilepsia sabemos…más bien poco…y todo está ¡en inglés!
La satisfacción del paciente es una parte esencial en la valoración de los servicios sanitarios, siendo una parte esencial en el llamado cuidado centrado en el paciente, que trata de mejorar los resultados de salud y de estrechar la brecha entre las percepciones del paciente y las necesidades para su atención adecuada. El proceso para estudiar estas relaciones se encuadra dentro del marco del Medical Outcomes Study (MOS) que propone un modelo de siete dimensiones en las que integrar la satisfacción del paciente y que incluyen el tiempo empleado en las consultas, la competencia del médico, las habilidades interpersonales, la cantidad y calidad de la comunicación, aspectos económicos, acceso al cuidado médico y la valoración general de la satisfacción ante la atención recibida.
Aunque los artículos haciendo referencia al punto de vista de los pacientes han aumentado en la última década, la información ha aparecido de forma dispersa y poco sistemática. Wiebe y colaboradores, han publicada la primera revisión de la literatura sobre este tema, realizada con criterios estrictos de inclusión, con el fin de presentar, sin prejuicios, los métodos usados para establecer el grado de satisfacción percibido por los pacientes ante la atención recibida, los factores que pueden afectar estos resultados, las estimaciones de las dimensiones antes mencionadas y las posibles asociaciones con los resultados de salud.
Tras una búsqueda exhaustiva en las más importantes bases de datos, de las más de 6000 citaciones revisadas, tan solo 25 artículos publicados desde 1993 aportaban información de suficiente calidad como para ser incluidos en el estudio. Los estudios diferían demasiado entre sí para hacer un estudio de meta-análisis, más riguroso en su metodología. La información hacía referencia a más de 6300 pacientes y tan solo dos estudios hacían referencia a la población pediátrica. Aunque los autores no pusieron limitaciones en el idioma de las publicaciones, todos ellos procedían de tan solo cuatro países de habla inglesa: Reino Unido, EEUU, Canadá e Irlanda.
En general, los pacientes reportaban estar satisfechos con muchos aspectos de la asistencia en epilepsia y el grado promedio de satisfacción, en términos generales, era del 87,5%. Sin embargo, habían algunos aspectos que se consideraban importantes como la comunicación, las habilidades interpersonales de los profesionales médicos y la cantidad y calidad de la información y que, sin embargo, fueron valorados como insatisfactorios. Menos del 50% de los pacientes en casi la mitad de los estudios se encontraban satisfechos en aspectos relacionados con la comunicación con los profesionales sanitarios. Curiosamente, los pacientes que atendían a clínicas en las que había una enfermera especializada dieron las puntuaciones más altas en cuanto a información y comunicación. Los conocimientos técnicos y generales de los profesionales obtuvieron el segundo grado de satisfacción más inferior.
Tratar de evaluar objetivamente la calidad de un servicio, especialmente el del cuidado de los pacientes con epilepsia, sujeto a una gran variabilidad de resultados, pronósticos y personas…resulta especialmente difícil. Como no debe resultar sorprendente, entre los factores asociados con mayor satisfacción figuraban un mejor grado de control de la crisis (un factor que no siempre depende de la competencia del médico sino con frecuencia de la causa de la epilepsia), así como la accesibilidad a servicios complementarios como psicología o trabajadores sociales. Otros aspectos muy valorados, aunque quizás menos evidentes, incluían la implicación personal de los profesionales en el mundo de la epilepsia así como la capacidad para tomar decisiones de forma consensuada con los pacientes, de modo que éste último pudiese sentirse parte activa de las mismas.
Si bien resulta reconfortante observar que los grados de satisfacción están alrededor del 80%, resulta más desalentador el hecho de que hasta el 90% de los estudios procedan de dos únicos países, Reino Unido y EEUU y que las estimaciones mencionadas se centran en dimensiones aisladas de la satisfacción del paciente, por lo que carecemos de una visión integral de estos aspectos. Además, los datos se recogieron utilizando principalmente instrumentos y cuestionarios no validados adecuadamente, y por tanto, resultan poco útiles para realizar estudios comparativos.
Para saber más:
Wiebe N, Fiest KM, Dykeman J et al..Patient satisfaction with care in epilepsy: How much do we know? Epilepsia. 2014 Mar;55(3):448-55.
http://dx.doi.org/10.1111/epi.12537