Investigadores de la Universidad de California en San Francisco (UCSF) han logrado controlar las crisis en un modelo animal de epilepsia del lóbulo temporal, implantando precursores de neuronas inhibitorias obtenidas de ratones recién nacidos en el hipocampo de ratones adultos. El tratamiento persigue restablecer el equilibrio entre excitación e inhibición en circuitos críticos para el desarrollo de las crisis aumentando el tono inhibitorio de la actividad cerebral, potenciando el neurotransmisor GABA en regiones deficitarias de esta sustancia. Las neuronas progenitoras implantadas eran capaces de migrar hasta 1,5 cm hasta situarse en los circuitos del hipocampo y diferenciarse en interneuronas gabaérgicas plenamente funcionales, un tipo celular cuya pérdida favorece el desarrollo de crisis epilépticas.
Con estas nuevas neuronas implantadas en el hipocampo, la transmisión sináptica inhibitoria aumentaba un 20-30% en los circuitos críticos para la generación de las crisis. Las crisis espontáneas se redujeron en más de un 90% y una serie de problemas de comportamiento y aprendizaje espacial que presentan estos ratones epilépticos, fueron reducidos a niveles similares a los observados en ratones sanos. Por el contrario, los injertos neuronales en la amígdala no lograron mejorar el número de crisis, pero sí tenían un impacto positivo en la hiperactividad que expresaban estos ratones.
La terapia celular se está convirtiendo en un campo muy activo para intentar controlar la epilepsia, ya que los fármacos actuales sólo alcanzan a controlar sus síntomas (las crisis) en un 70% de los casos, pero no consiguen corregir el proceso de base que lleva a la generación de las crisis. Indudablemente, es demasiado pronto para pensar en un tratamiento similar en humanos, pero es una vía de investigación muy prometedora que habrá que seguir de cerca en sus futuros desarrollos. Los resultados se publicaron en línea el día 5 de mayo en la revista científica Nature Neuroscience. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/23644485